martes, 21 de diciembre de 2010

¡Ya basta!

Anoche, en un programa de análisis político, en el once, Francisco Paoli Bolio decía que un Estado no puede ser fallido cuando ni siquiera éste existe, es decir, acusaba que los hechos ocurridos durante esta semana mostraban de manera muy clara que el Estado mexicano no existía no sólo en amplias zonas del país, sino además, en actividades institucionales.

¡Claro! De qué otra manera se puede explicar la fuga de 156 presos de una cárcel en Tamaulipas, los cuales salieron por donde salen los empleados ¡156 presos! Eso es igual a una liberación masiva anticipada e ilegal. ¿Dónde están las autoridades? ¿Dónde los responsables? Acaso son los mismos...

¡Claro! De qué otra manera se puede explicar el homicidio de una mujer que venía realizando una protesta pública por el fallo que un trío de jueces corruptos había hecho a favor del asesino confeso de su hija, ¡en frente del palacio de gobierno del Estado de Chihuahua! Según información periodística, la madre había ya denunciado amenazas recibidas contra su vida ¿Y las autoridades a'pa? Precisamente el secretario de Gobernación acababa de pedir una vez más que los ciudadanos nos quitáramos el miedo para combatir y denunciar a los criminales: ahí esta el resultado.

¡Claro! De qué otra forma nos podemos explicar el desastre ocurrido en San Martín Texmelucan, debido a una fuga de un ducto de Pemex. Haya sido una fuga por ordeña del ducto o por una falla del mismo, lo podemos calificar de crimen de Estado, por acción o por omisión, ¿o qué, de verdad Pemex no tiene identificadas las fugas? ¿pues qué no Pemex y su red de distribución son asunto de seguridad nacional? Una vez más ¿dónde putas están los responsables? Fue un accidente, dicen, sí, pero los accidentes suceden porque alguien no hizo bien su trabajo, y esta tragedia es de una tal magnitud que familias enteras murieron calcinadas dentro de sus hogares por no poder escapar de las llamas.

Estamos hartos, estamos hasta la madre de la incompetencia gubernamental, de su "El gobierno federal lamenta profundamente..." ¿Y luego? ¿Eso para que nos sirve? O peor: "El gobierno federal condena los hechos..." Cómo si ellos no fueran responsables por su negligencia, por su incapacidad. Ahora la PGR dice que llegarán hasta el fondo, lo que en buen mexicano significa QUE NO VA A PASAR NADA. 

Así estamos en México, perdidos entre las ineptitud de unas autoridades corruptas y el crimen organizado, que dicho sea de paso, mantiene la economía funcionando.

---Alexred---

P.S. Mientras tanto la liberación de Diego Fernández ha venido a significar una buena noticia con la que se pretende mandar al olvido muy propio de los mexicanos, las grandes tragedias que nos aquejan. Pero esto será materia de otro Psycho...

sábado, 11 de diciembre de 2010

Michoacán y la guerra

La situación que viven los habitantes de Michoacán, derivada de los enfrentamientos armados que durante está semana han tenido lugar en una extensa región de esta entidad, es por demás preocupante. Y es que con sólo darle una revisada a las primeras planas de los periódicos de los últimos días, no puedo dejar de pensar en el sufrimiento de nuestros connacionales en aquella zona.

Detengamonos un momento a pensar en lo difícil que debe ser la vida en aquel lugar cuando no conforme con sufrir las penurias de un modelo económico que los obliga -de hecho nos obliga a todos- a percibir ingresos insuficientes, derechos sociales, si los hay, mermados, desempleo, pocas sino nulas expectativas de desarrollo, mala distribución de la riqueza y un largo etcétera que incluye interminables crisis económicas, también tienen que lidiar con los problemas generados por una economía informal pero multimillonaria, ilegal, peligrosa y amenazante, pero que sin embargo, resulta que se presenta como opción para muchas personas que ven en el narcotráfico una  oportunidad para, de entrada sobrevivir.

Es un hecho que los ingresos generados por el narcotráfico han permitido que, a pesar de las recurrentes crisis que el modelo genera, la economía no se detenga y la crisis actual no sea más profunda, y que por estas mismas razones, el control del tráfico de estupefacientes y las actividades ilícitas concurrentes que éste genera, sea una prioridad en la política de cualquier gobierno. Es una realidad que entendió muy bien el régimen anterior y supo controlar, no en balde perduraron tantos años en el poder. El nuevo gobierno, no ha tenido nunca ese control, aunque si buscó participación en un negocio que, insisto, ha permitido que la economía del país no se haya derrumbado... más.

Mientras tanto, la gente tiene necesariamente que buscar opciones para encontrar sus sustento, esas opciones no han sido encontradas en los cauces legales, es decir, no han existido políticas que permitan que la población en su mayoría pueda obtener una satisfacción mínima de sus necesidades, esa quizá es la atracción del narcotráfico. No significa que todos estén metidos en el negocio, pero todos somos propensos, vulnerables ante él. Asimismo, el asunto toma matices más peligrosos cuando la economía formal se ve obligada a participar, ya por coacción, ya por necesidad, porque entonces el dinero sucio, que necesita limpiarse, busca los canales en los que pueda entrar en la economía, y lo peor reproducirse.

Si a estos factores le agregamos la falta de una estrategia clara y bien definida que pueda traducirse en una verdadera lucha contra el negocio ilegal; la falta de coordinación entre las policías; la falta de confianza de la gente hacía sus instituciones; la corrupción imperante en todos los niveles de gobierno; así como la ineficiencia de la autoridad, tenemos como resultado la pérdida de control del Estado sobre extensas zonas del país, así como la impresión -bien fundada- de que más bien los métodos utilizados hasta el momento están dirigidos a contener y a amedrentar a una sociedad que en muchos lugares comienza a organizarse y a cuestionar fuertemente al mismo gobierno y sus prácticas.

En este contexto, no puedo dejar de pensar los problemas que para la gente ocasiona una situación de enfrentamiento como el que está ocurriendo en Michoacán; con un gobierno propenso a reprimir a aquellos que piensa que le pueden causar problemas, hay que recordar Atenco, donde la policía actuó en contra de las población civil sin distinción alguna y con una amplia cobertura mediática, por eso me cuesta creer las cifras de "nueve muertos" con tantos días de batalla de gran intensidad y con una cobertura menos extensa, ofrecidas por el gobierno y reproducidas por los medios de comunicación, y que además la población civil no se haya visto afectada más que con el no menos lamentable saldo de un bebé muerto.

Se necesita urgentemente alguien capaz de resolver este problema. Mientras tanto, solidaridad con Michoacán.

---Alexred---

P.S. Pero que tal el incremento de los salarios de la alta burocracia por concepto de "Bono de Riesgo" por una actividad a la que ellos decidieron dedicarse, y que por lo mismo se les paga; bono de riesgo por un riesgo que en realidad no toman, yo quisiera saber si los militares que están en el frente de batalla tienen un "bono de riesgo" por hacer una tarea que ellos no decidieron ni les corresponde hacer y por la cual en verdad se arriesgan.