miércoles, 7 de abril de 2010

La cultura civico-política

La pregunta de un compañero de derecho en el posgrado, fue en relación a la actitud que debe tener el ciudadano frente a los actos de gobierno, que en México parecen estar dirigidos a una minoría autoimpuesta o de cuño enquistada en el proceso de toma de decisiones y de actos de autoridad: una oligarquía pues.

La primera respuesta que me vino a la mente y que afortunadamente tuve tiempo de reflexionar, fue que sí, que el ciudadano debe tener una actitud de participación y defensa, no sólo de sus intereses, sino también de los intereses de la sociedad en su conjunto y no esperar que el gobierno sea quien solucione todo. Sin embargo –y aquí la crítica-, resalté que nos encontramos en un estado de derecho pleno tan sólo en el discurso, que hasta donde yo entiendo, las autoridades tienen la obligación jurídica, ética y moral, de respetar la ley, el principio establece que el ciudadano puede hacer incluso todo aquello que no esté prohibido por las leyes, mientras que la autoridad se tiene que circunscribir a aquello que sólo la legislación le asigna como función y esto en la realidad no sucede así.

Nuestra cultura civico-política, pareciera estar atorada en una especie de limbo entre las tres tipologías principales y no encontrar acomodo en sus combinaciones*; aunque me inclino más por pensar que aun así, estamos en un proceso de semi madurez –cómo el proceso por el que pasan los niños para convertirse en adolescentes llamado pubertad- en el que la gente trata de informarse un poco para tomar decisiones que de algún modo le van a afectar en su vida cotidiana: decisiones políticas. El único problema –que resulta de una gravedad peligrosamente exponencial- es la forma de hacerse de esa información, los medios de comunicación de masas tienen coptados los canales informativos, y en un país en el que la educación se recibe en un porcentaje alto a través de la televisión, es como aceptar que en la pubertad el consejo de un amigo que es todavía más baboso que uno, es la verdad absoluta. Esto es de lo que hay que cuidarse pues en la formación de una cultura civico-política, como en la etapa de formación en la pubertad –aplicando un lugar común- árbol que crece torcido…

* Se refiere a la tipología presentada por Gabriel Almond y Sidney Verba en el ensayo "La cultura política" en Diez textos básicos de ciencia política. Ariel ciencia política.

---Alexred---

P.S. A leer la ley antimonopolios.

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